Congreso de la CDMX aprueba impuestos a plataformas digitales

16/12/21

Pese a las reiteradas advertencias sobre los riesgos que implicaba aplicar un nuevo impuesto a un negocio emergente, el Pleno del Congreso de la Ciudad de México (CDMX) aprobó una nueva tasa impositiva a plataformas dedicadas a reparto de alimentos y otros productos, como parte del dictamen al Código Fiscal que integra el Paquete Económico 2022.

El dictamen, que fue aprobado en la madrugada del 15 de diciembre tras recibir 39 votos a favor, 16 en contra y cero abstenciones, se espera que dotará a la Ciudad con ingresos por hasta 234.87 mil millones de pesos para 2022, un monto 7.4 por ciento mayor al aprobado para 2021.

Entre los principales cambios, se incluye la adición de un cobro de 2 por ciento a las plataformas digitales para reparto de paquetes o alimentos, como concepto por uso de la infraestructura urbana.

El Código Fiscal se aprobó con pocos cambios, pero se logró adicionar un párrafo a la propuesta del Artículo 307 TER, que establece que repartidores y usuarios no serán afectados por el nuevo gravamen.

“El aprovechamiento a que se refiere este artículo es intransferible y no estará sujeto a traslación, ni deberá incluirse en el costo total a cargo del usuario, ni cobrarse a los terceros oferentes o a cualquier otro tercero que realice la entrega de paquetes, alimentos, víveres o cualquier tipo de mercancía”, señala.

A pesar de que diputados de oposición presentaron varias reservas para modificar o eliminar dichas propuestas presentadas en el Código Fiscal, todas fueron desechadas. Y puntualizaron que no se cumplió con la promesa del Gobierno de la Ciudad de México de no imponer más impuestos.

Legisladores como Federico Döring, del Partido Acción Nacional (PAN), y Royfid Torres, de la Asociación Parlamentaria Ciudadana, pidieron desechar la modificación del nuevo impuesto al Artículo 307 TER.

“Estas plataformas ya pagan ingresos sobre la renta y también es discriminatorio porque sólo se aplica a las apps de reparto de alimentos y servicio, y no a todas en general. Sólo gravamos (algunas) como Uber, DiDi, Rappi, dejamos otras plataformas como Amazon y Microsoft, que también hacen uso de este tema y hacen desgaste de las calles de la ciudad”, indicó Royfid Torres, diputado de la Asociación Parlamentaria Ciudadana.

Legisladores de oposición señalaron que el impuesto afectará principalmente al usuario y repartidores, pues el gravamen lo absorberán estos y no la empresa.

Entre otros cambios relevantes para el sector digital, se incluyó también modificaciones al artículo 134 para que conciertos y funciones de entretenimiento que sean transmitidas en vivo paguen el Impuesto sobre Espectáculos Públicos.

Héctor Barrera, diputado por el PAN, acusó que ante la carencia de incentivos por parte del gobierno local para negocios restauranteros y de espectáculos, “tuvieron que idear mecanismos alternos para poder seguir trabajando de manera segura, aprovechando las redes sociales y las plataformas digitales. Y ahora el gobierno rapaz y voraz quiere aprovecharse de la clase trabajadora.

“No hay nada más alejado de la realidad que ese impuesto para las plataformas. Al final del día o impacta al consumidor o le impacta a esta persona que se la rifa en las calles”, agregó.

José Mercado, diputado por parte de Morena, defendió la aplicación de este nuevo gravamen, al considerar que el impuesto pretende ser aplicado a “empresas multinacionales”, sin que sea trasladado a los consumidores, ya que esto sería ilegal y, al contrario, debería combatirse.

“Es un aprovechamiento dirigido para un sujeto delimitado que no puede ser transferible y que no grava el consumo, porque la base gravable es la tarifa que cobra la plataforma al restaurantero. Después hay que dejar claro que no es una estrategia recaudatoria, es un primer paso para poner un orden a un modelo de negocios innovador y que ha sido útil a la ciudad, hay que decirlo, pero que aprovecha la infraestructura pública que con los impuestos pagan los ciudadanos, pagan los restauranteros, y aprovecha el trabajo de los repartidores sin pagarle y corresponderle un solo centavo a la ciudad”, indicó.