20 de abril de 2024

La urgente transformación digital de los medios

11/04/22

Cada minuto en Internet, las personas comparten alrededor de 695 mil historias en Instagram, envían 69 millones de mensajes por WhatsApp y Facebook Messenger, se suben 500 horas de contenido a YouTube y Netflix gana 28 mil suscripciones.

La cantidad de datos, información, noticias y contenidos que se producen y se comparten en línea es enorme. De acuerdo con la firma de investigación Statista, la gente pasa en promedio casi siete horas al día navegando en Internet, casi una tercera parte de su día y probablemente la mitad mientras están despiertos.

Sin duda, toda esta interacción en el entorno digital está cambiando la forma de comunicarnos, de comunicar y las necesidades de comunicación. Los medios tradicionales deben adaptarse a nuevas dinámicas y transformarse en una era vertiginosa que parece ser propia de “la brevedad”.

Pero, ¿realmente el entorno digital es tan escurridizo? ¿Estamos inmersos en una era de lo instantáneo, lo difuso y lo inasible? El 23 y 24 de marzo, la serie de televisión internacional TVMorfosis, coproducida por TV4 de Guanajuato y el Canal 44 de la Universidad de Guadalajara, reunió a una serie de ponentes para buscar respuestas a estas interrogantes.

Retomando las palabras de Carlos Scolari, uno de los más notables teóricos de la comunicación de estos tiempos, “lo breve también forma parte de los grandes discursos y las grandes narrativas”. Me parece importante que partamos de esa premisa para entender la dinámica de los contenidos digitales y las audiencias hoy en día.

Mucho se dice que las personas no leen en Internet ni dedican más de unos segundos (y, con suerte, quizá minutos) de su atención a un mensaje, y al menos en los medios (tradicionales y digitales) abunda la teoría de que los contenidos más breves serán los más exitosos

Una parte de esto es cierto. Entre un mar de información disponible en línea con solo un clic, la atención de las personas es cada vez más efímera. ¿Cómo captar la atención de alguien cuando está desplazándose rápidamente (scrolling) entre cientos o miles de noticias y mensajes?

Si una persona pasa 52 minutos en TikTok diariamente, visualizando videos cortos uno tras otro, ¿de qué manera podemos lograr que dedique al menos cinco minutos a un buen contenido periodístico? Si algo tenemos que aprender del éxito de las redes sociales es a crear nichos, audiencias más segmentadas y entender cuáles son sus intereses, deseos y necesidades informativas y cómo, dónde, cuándo y desde qué dispositivos buscan satisfacerlas.

Las personas sí leen, todo el tiempo están leyendo: publicaciones en Facebook, mensajes en WhatsApp o tuits en Twitter; pasan varias horas incluso viendo videos, consultando qué mirarán en alguna plataforma de streaming, o escuchando un podcast de varios minutos e incluso series de muchas horas. La digital no sólo es la era de la brevedad, pero no necesariamente es la era de lo profundo, lo sustancial y lo trascendente.

A diferencia de las redes sociales, ser virales no debe ser el objetivo primario en los medios de comunicación. Un buen contenido periodístico –como señaló en TVMorfosis Daniela Caballero, directora de AhoraEntiendoMx– puede volverse viral sin que esa sea su meta principal y sin ceder a lo trivial y la falta de rigor que puede tener la inmediatez.

No tenemos que competir con la capacidad de viralización de las redes sociales, porque esa batalla probablemente ya está perdida, sino aprender de sus herramientas para ampliar el alcance y la resonancia de los contenidos. Hoy todos los sectores económicos y sociales están afrontando procesos de transformación digital; ya no es opcional y los medios de comunicación no son la excepción.

Me parece que lo digital no matará la esencia del periodismo riguroso que busca exponer, explicar, investigar y develar. Por el contrario, esas características serán las que lo salven y den paso a un periodismo digital renovado. Ahora más que nunca es indispensable la profesionalización en esta área, no hay que dejar atrás las metodologías y los procesos que han sido la base de esta profesión.

Las redacciones de los medios están preocupadas por ganar primero la noticia, ser virales y conquistar a las audiencias en los nuevos formatos y medios que brindan las plataformas digitales. Todo eso en poco tiempo, con limitados recursos y sin comprender aún las nuevas narrativas, posibilidades y desafíos que el ecosistema digital trae a los medios.

Así se explica que algunos de los grandes medios tradicionales han confundido las estrategias digitales con un copiar y pegar de sus lenguajes originales a los canales digitales. Las mismas notas que se ven en las versiones impresas del periódico se trasladan a los sitios web y los mismos audios de la radio se suben a las plataformas de streaming.

La digitalización para varias emisoras de televisión y radio (públicas y privadas) también se ha reducido a replicar los contenidos en sus páginas web. La consulta de sus programas se ha vuelto más sencilla de esta manera, es cierto, pero la accesibilidad está muy lejos de lo que ofrecen las plataformas de contenidos a la carta, como Netflix, Disney+ o HBO Max.

Reciclar no es lo mismo que crear, y eso es algo que no hemos comprendido en los medios de comunicación. Sin duda, los contenidos pueden ser sumamente valiosos pero quedarán en el olvido si la narrativa no es la adecuada. Los medios de comunicación y las y los periodistas necesitamos transformarnos y entender la irrupción digital que ya es una realidad.

Fuente: https://dplnews.com/tvmorfosis-la-urgente-transformacion-digital-de-los-medios/