28 de marzo de 2024

Pagos de espectro por cobertura: buena práctica para cerrar la brecha digital, pero insuficiente

En países como Colombia y Perú, los operadores pueden optar por pagar por el uso del espectro a través del despliegue de banda ancha móvil. La medida permite la canalización directa al cierre de la brecha digital, pero los especialistas advierten que debe ir acompañada de otras medidas para ser una política exitosa

24/02/22

Una asignación de espectro radioeléctrico exitosa ―según las voces expertas― es aquella que prefiere la inversión por encima de la recaudación, porque todas las partes ganan: la industria, la sociedad, el gobierno y el ecosistema digital en su conjunto.

Por ese motivo, las autoridades de telecomunicaciones en América Latina y el mundo están adoptando modelos de pago de espectro que permitan dirigir los recursos directamente al desarrollo de la infraestructura y la conectividad, especialmente en zonas rurales o de difícil acceso.

Las condiciones y compromisos de cobertura ya se han vuelto un componente fundamental en las licitaciones de espectro y en los procesos de renovación de licencias para el aprovechamiento de frecuencias, incentivando las inversiones y el cierre de la brecha digital.

Brasil, por ejemplo, captó 9 mil 150 millones de dólares (50.2 mil millones de reales) en la subasta de espectro para 5G que se llevó a cabo en noviembre de 2021. El 84.23 por ciento de ese valor lo destinarán los operadores móviles a la inversión en cobertura hasta 2029, mientras que el resto se irá a las arcas del Estado.

En algunos países, como Colombia y Perú, el gobierno dispone mecanismos para saldar parte del costo del espectro mediante el despliegue de cobertura de servicios de telefonía e Internet móvil (o pago en especie).

Los operadores de telecomunicaciones de Perú pueden cubrir hasta el 40 por ciento del canon anual que deben pagar por el uso del espectro radioeléctrico a través de proyectos de conectividad a zonas rurales y de interés social.

De acuerdo con el Reglamento de la Ley de Telecomunicaciones, las empresas pueden acogerse a este mecanismo por un periodo de dos años, llevando cobertura a comunidades desconectadas o únicamente con acceso a redes 2G, las cuales pueden ser elegidas entre una lista elaborada por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones.

Con este esquema, el gobierno apunta a propiciar el despliegue de infraestructura y la modernización de las redes en áreas de difícil acceso, a las que de otra manera no llegarían los servicios porque tampoco son beneficiadas por algún programa de cobertura social.

Telefónica, Claro, Entel y Bitel optaron por saldar parte de sus contribuciones por el uso del espectro a través de este mecanismo conocido como “canon por cobertura”. A principios de año, las compañías acordaron implementar banda ancha móvil 4G en una serie de localidades desatendidas.

Colombia cuenta con un modelo similar llamado “obligaciones de hacer”. Se trata de una alternativa de pago por hasta el 60 por ciento del valor por el otorgamiento o renovación de permisos de uso del espectro, a cambio de la implementación de cobertura móvil en zonas rurales y de bajos recursos.

El Ministerio TIC creó un Banco de Proyectos en el que se identifican las comunidades o poblados apartados y vulnerables que podrán ser conectados por medio de este mecanismo de pago en especie. El decreto 825 de 2020 también permite que las empresas de telecomunicaciones soliciten incluir alguna localidad en particular.

Uno de los factores relevantes en el caso colombiano es que el Ministerio prioriza los proyectos ubicados en municipios que hayan eliminado las barreras al despliegue de infraestructura, lo cual busca ser un incentivo más para que las autoridades locales faciliten los trámites y permisos a la instalación de antenas, estaciones y otros elementos de las redes móviles.

Fuente: https://dplnews.com/pagos-de-espectro-por-cobertura-buena-practica-para-cerrar-la-brecha-digital-pero-insuficiente/