COMUNICACIÓN

 

COLUMNAS POLÍTICAS

 

1. Mano dura. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, les dice a los ejidatarios que bloquean el Arco Norte que pueden esperar, porque su gobierno no cederá a chantajes. Los acusa de estar “encampanados” por abogados transas, buscando más dinero del que les corresponde por la carretera construida hace 20 años. Sin titubeos, López Obrador les dice que, si la demanda es justa, se pagará, pero sólo lo que marque el avalúo. Nada más. La advertencia es directa: en su gobierno, no hay lugar para presiones ni artimañas. ¿Les quedará claro?

2. Juego de poder. La ministra presidenta de la SCJN, Norma Piña, toma la iniciativa para frenar el avance de la controvertida reforma judicial. Abre una consulta al pleno del máximo tribunal, respondiendo a las inquietudes de la Asociación Nacional de Magistrados y Jueces de Distrito, que temen por la autonomía judicial. La pelota está del lado de la ministra Lenia Batres, quien deberá elaborar un proyecto para decidir si se procede con medidas cautelares. No hay prisa, pero el reloj político sigue corriendo. En un tribunal donde cada movimiento cuenta, Piña busca dar un golpe de autoridad. Veremos si lo logra.

3. Mea culpa. A escasos días del fin del sexenio, el secretario de la Función Pública, Roberto Salcedo Aquino, da la cara por el desastre en Segalmex, aunque el golpe se siente diluido. De los 9 mil 500 millones de pesos desviados, apenas 2 mil 700 millones son el daño real al erario, según el último informe. Se presenta como un avance, pero el escándalo sigue siendo el mayor desfalco en la 4T. Con 156 denuncias penales en juego y 955 millones recuperados, queda claro que el gobierno intenta cerrar con cuentas medianamente claras, aunque el mea culpa llega tarde y a cuentagotas. Por cierto, y el artífice, Ignacio Ovalle, ¿sin problemas?

4. Desafortunado papelón. Un documento firmado el 3 de septiembre dejó fuera del juego al subsecretario de Planeación en el Estado de México, Reyes Ruiz González, pero no por voluntad propia. La barrera burocrática le impide el acceso a su oficina, y ni él ni Delfina Gómez están detrás del zafarrancho. ¿Se trata de una falla administrativa o es un conflicto político?, el caso es que se pone en peligro la continuidad de programas sociales y proyectos clave de infraestructura. Gómez, quien prometió transparencia y eficiencia, no puede permitirse riesgos en obra pública o los programas sociales. ¿Es tropiezo o es mala fe?

5. Firmeza naranja. Alejandra Barrales, senadora de MC, no deja lugar a dudas, su bancada votará en contra de la reforma judicial. Aunque reconoce la necesidad de un cambio profundo, afirma que esta propuesta no garantiza justicia para los mexicanos. Ante los rumores de posibles abstenciones o votos favorables, Barrales subraya que MC se mantiene en la oposición y no cederá. Incluso llama a otras fuerzas opositoras a unirse en esta causa, dejando a un lado diferencias ideológicas. Daniel Barreda fue el último en pronunciarse y aseguró que su voto será en contra. ¿Alguien dará un paso de costado?

 

Nos comentan que ya encarrerados, los senadores de Morena y sus aliados podrían votar la reforma judicial el martes y no el miércoles, como se tiene previsto. Es notoria la prisa de los legisladores del bloque oficialista por darle gusto al presidente Andrés Manuel López Obrador y entregarle el acta de defunción de la actual Suprema Corte. Nos dicen que Morena podría convocar a una doble sesión el martes para acelerar la discusión y votación de la reforma. La sesión de ese día fue convocada a las 11 de la mañana en la sede de Reforma, pero también se tiene lista la sede alterna de Xicoténcatl por si se necesita, o incluso, nos hacen ver, podrían usarla como señuelo para confundir a los manifestantes. Por lo pronto, las bancadas oficiales están seguras de tener la mayoría calificada, a pesar de que los 43 senadores de oposición ya comprometieron públicamente su voto en contra. Haga sus apuestas.

Preguntas Frecuentes

Que la diputada Olga Sánchez Cordero, de Morena, salió ayer del hospital donde permanecía desde el martes por la secuela de una antigua afección cardiaca y ya se encuentra en casa, recibiendo llamadas de secretarios de Estado, colegas juristas y algunos legisladores de su partido, pero también de la oposición… mientras en algunos círculos de la 4T sigue una campaña en su contra por supuestamente argumentar un asunto de salud para ausentarse de la votación de la reforma al Poder Judicial en sede alterna de la Cámara de Diputados.

Que al menos para algunos resultó favorable la alianza presidencial PAN-PRI-PRD, como el ex encargado de los llamados xochilovers, Alonso Cedeño, quien pronto dejó al blanquiazul y a la sociedad civil y se sumó al tricolor, desde donde se encarga de los pormenores de las conferencias de prensa de su dirigente nacional, Alejandro Moreno. La clave está en que desde Acción Nacional aseguran que este personaje fue quien dio a Xóchitl Gálvez encuestas fallidas en las que ella subía como espuma en las preferencias.

Que mientras ayer la 4T en pleno, desde Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum hasta Ricardo Monreal y Yasmín Esquivel, veía improcedente el freno a la reforma judicial, ahora un juez federal de Colima otorgó la cuarta suspensión provisional que ordena detener el proceso legislativo de la iniciativa que se discutirá en el Senado, ya aprobada por los diputados.

Que con fecha 3 de septiembre fue separado de su cargo Reyes Ruiz González, subsecretario de Planeación y Presupuesto de la Secretaría de Finanzas del Estado de México, mediante el oficio 21801A000-1707/2024, que hace hincapié en que no se le puede permitir el acceso en lo sucesivo, todo como parte de las auditorías ordenadas por Luis David Fernández Araya, subsecretario de la Contraloría del gobierno estatal, dirigidas a hacer una limpia de funcionarios de la administración anterior que condicionaban la asignación de recursos para obras.

 

 ‌

AHORA que los 43 senadores de oposición ya dijeron que votarán en contra de la reforma judicial hay quienes se preguntan si esa fue la verdadera razón por la que Morena y sus aliados levantaron el pie del acelerador después de usar la aplanadora en la Cámara de Diputados.

AUNQUE Gerardo Fernández Noroña insiste en que tienen los votos suficientes y sobrados, las cuentas nomás no salen.

DE LO QUE no cabe duda es de que los morenistas seguirán cabildeando, ofreciendo y presionando en los próximos días para lograr ese voto que les falta, nomás que el compromiso de “Los 43 del Senado” ya les complicó el escenario.

PORQUE, si alguno de ellos decide cruzar la línea y votar en favor de la reforma, no solo tendrá que justificar el razonamiento de su voto, también deberá explicar qué fue lo que lo hizo cambiar de opinión.

DESDE LUEGO que no deja de resultar irónico que el presidente del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, acusara la existencia de moches u ofrecimientos de “decenas de millones de pesos” a senadores de la oposición para votar en favor o ausentarse de la votación.

PERO bueno, hay que tomarlo en serio. Sin duda que un cambio del sentido del voto a estas alturas para nada sonaría lógico y sí sonaría sospechosamente metálico.