Regulación de la IA en México podría darse este sexenio

En el corto plazo el crecimiento de la nube se dará en rangos de doble dígito anualizado.

Durante el presente sexenio sí podría regularse por ley el uso de la Inteligencia Artificial (IA) en México de manera eficiente; hay legisladores con conocimientos suficientes para colocar sobre la mesa el tema, quizá asesorados por instituciones como la UNAM o el IPN, aunque por supuesto habrá “un tema político” en el planteamiento, anticipó Rodrigo Giles, cofundador de Nubosoft, empresa especializada en soluciones de cómputo en la nube.

En entrevista con ConsumoTIC, el especialista anticipó que “sí tendremos la capacidad en este sexenio de regular el uso de la IA en nuestro país”, como ya se ha hecho en Europa, donde las directrices generales marcan algunas limitaciones: esta tecnología no puede tomar decisiones por sí sola en materias como seguridad nacional o pública, salud, bienestar de las personas o política económica, donde necesariamente deben ser personas quienes tengan la última palabra.

Anticipó que los niveles de inversión en infraestructura de nube pasarán de los actuales 20 o 25 por ciento respecto al total de la inversión de infraestructura tecnológica en el mundo, a rangos del 35 al 40 por ciento en los próximos tres a cinco años y paralelamente, «llegaremos a un punto de consumo de la IA tal en América Latina que va a ser necesario regular y México será uno de los primeros países en hacerlo”.

Adelantó que en el corto plazo el crecimiento de la nube se dará en rangos de doble dígito anualizado como ha pasado en los últimos años, mientras el mercado de los datos crecerá entre 50 y 70 por ciento y la aplicación de IA seguirá creciendo a triple dígito, lo cual se explica por qué esta última tecnología aún es relativamente nueva y los datos base son bajos.

Al hablar sobre las tendencias del mercado de la nube en este año, enfatizó que habrá mucho trabajo en materia de cumplimiento regulatorio y ciberseguridad; esta última, “va a terminar de consolidarse, al grado de que si hoy existen empresas que siguen dudando de irse a la nube, al momento que vean la robustez de estos sistemas, que cumplen con la norma ISO 27001 se convencerán, sobre todo, porque llegar a ese nivel de protección fuera de la nube es muy complejo y muy caro”.

Otra de las tendencias para este año, será que muchas empresas mantendrán una operación simultánea entre la nube (sobre todo nuevas operaciones) e infraestructura propia, no por desconfianza en esta tecnología, sino para amortizar la inversión hecha previamente en esa infraestructura y así se mantendrán aproximadamente por tres años, mientras puedan seguir usándola.

Igualmente, se anticipa que habrá un uso “híbrido” de las nubes. Es decir, las empresas no colocarán todas sus operaciones en una sola (Google, AWS o Asura), sino que las distribuirán por lo menos en dos.

“Una tendencia que vemos es que la operación de las empresas se coloca en una nube y la recuperación de datos en otra. Esto se debe a que, si bien cada una de las nubes tiene redundancias y seguridad suficiente para soportar todas las operaciones (incluyendo recuperación en caso de ataque), las empresas no quieren depender de una sola de ellas y prefieren prever cualquier eventualidad”.

En su mayoría las empresas grandes, transnacionales y globales, siguen esta tendencia, pero también las pequeñas y medianas pueden hacerlo sin problema.

No obstante, el especialista aclaró que esta es una simple preferencia y no se debe a cuestiones técnicas, pues actualmente las nubes de Google y de Amazon que operan en México, cuentan ya con centros de datos en el país, que cumplen con la normatividad más estricta, entre ellas, la del sector financiero, que exige altos estándares de seguridad y que los datos permanezcan dentro del territorio nacional.

A manera de ejemplo, dijo que el procesamiento de datos en la nube se da a partir de códigos, es decir, el nombre de la persona se descompone en una serie de números y así va y viene para la autorización de un crédito bancario, a fin de proteger la identidad del individuo; una vez que se autorizó o no el crédito, la información vuelve codificada y cuando baja al usuario, ya lo hace con el nombre y apellidos.

Al respecto, se le preguntó si ese nivel de seguridad podría influir en la decisión del gobierno federal de alojar el sistema LlaveMX en la nube, a lo cual, Rodrigo Giles señaló que no necesariamente.

Consideró que ésa será una decisión de política pública que tomen en su momento las autoridades, pero puede que se decidan por la nube (que tiene todos los controles de seguridad y ciberseguridad necesarios) o bien por infraestructura propia, si ésta cumple con los mismos estándares.

Finalmente, anticipó que este año se podría empezar a ver una alta democratización de la IA que, si bien puede tener como limitante la conectividad, en general está creciendo.

Prueba de ello es que hace tres años, todavía la aplicación de esta tecnología entre los casi 5 mil clientes de Nubosoft rondaba el 1.0 por ciento y a la fecha ya es del 10 por ciento, lo cual se debe a que cada día se encontrarán nuevos casos de uso a la tecnología.

https://consumotic.mx/tecnologia/regulacion-de-la-ia-en-mexico-podria-darse-este-sexenio/